XXVI Domingo del Tiempo Ordinario
Lc 16,19-31
LA SOLIDARIDAD CON EL HERMANO ES FUENTE DE SALVACIÓN
Este domingo seguimos con el tema de la independencia y libertar que debemos tener ante el dinero. O mejor dicho del uso del dinero en favor de los hermanos. El mensaje siempre se nos propone con una parábola.
En la parábola que nos presenta Jesús podemos descubrir una apremiante llamada de atención a no ignorar el sufrimiento del hermano que esta cerca. El rico no debía ignorar el sufrimiento de Lázaro que estaba en la puerta de su casa (v.20). Una actitud de desatención descarada tiene su recompensa. Las riquezas pueden nublar nuestra mirada y así no ver el sufrimientos de nuestros hermanos que necesitan de nuestra solidaridad. Peor aún, cuando esa riqueza es adquirida a costa de la explotación del otro. La visión egoista de la vida siempre es dañina para todos.
En el mensaje de Jesús se puede notar con bastante claridad la intención de Jesús: la invitación a la solidaridad. La sensibilidad ante el hermano está presente en la escritura en muchos pasajes y la sigue realizando la Iglesia de diversos modos. Muchos hombres y mujeres en el pasado nos han dado ejemplo de acciones concretas de amor que van de acuerdo con nuestra fe en el Dios de la vida. También en el presente se alzan voces para que no ignoremos el sufrimiento del hermano. ¿Será que tendremos oídos atentos para escuchar esas voces?
Recordemos, además, que la solidaridad con el hermano es fuente de salvación, es decir, puede determinar nuestro futuro. En la parábola que presenta Jesús la falta de sensibilidad del rico tiene una consecuencia: termina en el infierno, en medio de tormentos (v.23). La insensibilidad es una opción peligrosa. Y todo comienza por el hecho de no querer escuchar a "Moises y los profetas" (v.29). Es necesario escuchar el mensaje de vida que nos invita a vivir con corazón solidario delante de Dios.
De momento, propongo que comencemos con pequeños cosas, con pequeños actos de com-pasión, para adentrarnos cada vez más en el estilo de Jesús. Poco a poco, seguirermos creciendo en lo que significa realmente vivir la fraternidad en modo efectivo y eficaz.
¡Ánimo!
Para profundizar:
https://www.religionenlibertad.com/blog/45346/el-rico-epulon-y-el-pobre-lazaro.html