Jueves Santo
Jn 13,1-15
TAMBIEN USTEDES DEBEN LAVARSE LOS PIES UNOS A OTROS.
Jesús nos ama con un amor extremo, por eso se dona a su comunidad. Y el gesto que manifiesta su entrega es la humildad reflejada en el lavatorio de los pies de sus discípulos.
Pero, el reto impresionante que nos deja el Maestro es: que también nosotros debemos hacer lo mismo.
¿Cómo hacer realidad este gesto ahora?
Sugiero algunas indicaciones:
- La enseñanza responsable de la fe de parte de los padres a sus hijos en el corazón de las familias;
- El servicio realizado en un ministerio parroquial;
- Los gestos de solidaridad en momentos especiales;
- La comprensión de los hermanos que son más fastidiosos en la comunidad (recordemos que Jesús también lavó los pies a Judas)
Seguramente hay muchos más ejemplos...
Seamos valientes y aceptemos el reto del Maestro.
¡Ánimo!