CUERPO Y SANGRE DE CRISTO
Jn 6,51-58
ALIMENTO Y BEBIDA DE SALVACIÓN
Jesús se ofrece como alimento (pan) para que tengamos vida. Es un gesto realmente impresionante que Jesús haya querido darse a sí mismo; esto es una muestra de amor intenso, amor extremo que llega hasta las últimas consecuencias.
Jesús se interesa por nosotros, quiere que tengamos vida nosotros. Que mejor vida que la que ofrece Jesús. Si nos alimentamos de esa verdadera comida podremos vivivr en Jesús y de Jesús. Este modo de decir las cosas nos permite descubrir que nuesrta vida sólo tiene sentido en la medida que dejemos que Jesús sea nuestro alimento.
Las expresiones asi concretas sobre el pan de vida que nos presenta Jesús en el evangelio de Juan son una muestra clara de la cercanía e interés que el Señor tiene para hacernos vivir de su presencia.
Somos seres sacramentales y necesitamos sacramentos para entender a Dios y dejar que la gracia de Dios llegue a nosotros.
Jesús en la eucaristía nos muestra su amor permanente.
La fiesta del Cuerpo y la Sangre de Cristo, nos da la oportunidad de agradecer el don de Jesús, de celebrar su presencia y de comprometernos a seguir buscando su presencia para tener vida auténtica en nosotros.
Nuestra comunidad parroquial, seguirá creciendo si permanece centrada en Jesús-Eucaristía. Que bueno es saber que Jesús siempre nos invita a permanecer en él.
¡Ánimo!
PARA PROFUNDIZAR:
Catecismo de la Iglesia Católica, 1324-1327:
1324 La Eucaristía es "fuente y culmen de toda la vida cristiana" (LG 11). "Los demás sacramentos, como también todos los ministerios eclesiales y las obras de apostolado, están unidos a la Eucaristía y a ella se ordenan. La sagrada Eucaristía, en efecto, contiene todo el bien espiritual de la Iglesia, es decir, Cristo mismo, nuestra Pascua" (PO 5).
1325 "La comunión de vida divina y la unidad del Pueblo de Dios, sobre los que la propia Iglesia subsiste, se significan adecuadamente y se realizan de manera admirable en la Eucaristía. En ella se encuentra a la vez la cumbre de la acción por la que, en Cristo, Dios santifica al mundo, y del culto que en el Espíritu Santo los hombres dan a Cristo y por él al Padre" (Instr. Eucharisticum mysterium, 6).
1326 Finalmente, por la celebración eucarística nos unimos ya a la liturgia del cielo y anticipamos la vida eterna cuando Dios será todo en todos (cf 1 Co 15,28).
1327 En resumen, la Eucaristía es el compendio y la suma de nuestra fe: "Nuestra manera de pensar armoniza con la Eucaristía, y a su vez la Eucaristía confirma nuestra manera de pensar" (San Ireneo de Lyon, Adversus haereses 4, 18, 5).